El País Vasco

El fin de semana pasada, exploré nuestro vecino al norte. Tenía mucho para aprender. Antes de mi viaje, solamente sabía que El País Vasco era la locación del Museo Guggenheim y el lugar del nacimiento de ETA. No es un gran base del conocimiento, y no hay duda que mi experiencia me providió con más información sobre esta comunidad orgulla que es basado en los labores de la tierra y el mar. Fuimos por autocar al Bilbao. Inmediatamente, podía ver la estructura de la ciudad. Es construida alrededor de la ría y este hecho nos muestra la importancia del pescado y esta fuente de ingresos. También, me gustaba ver como la ciudad anciana ha cambiado por los siglos, y especialmente durante los últimos veinte años. Con los museos nuevos (incluso el Guggenheim), los proyectos de la modernización, y sus tentativas exitosas para ser reconocido como una ciudad mundial, podía ver el pasado, el presente, y el futuro brillante adentro de dos o tres cuadros.
El Guggenheim es una joya de España. El edificio es precioso y su simbolismo es fuerte. Su aperiencia como un barco y un pez juntos al lado de la ría habló claramente y su colleción del arte moderno era sin precio. Las obras de James Rosequist eran increíbles y me encantaba sus pinturas grandísimas y sus imagenes de arte popular. La gran escala de sus obras crea una variedad de sensaciones. Cuando estaba muy creca de la pintura, solamente había colores y lineas, pero, en contraste, después de me alejé, era una obra. Una obra que tenía un corriente adentro. Una vida adentro de las lineas y colores. Me sentía que no fuera solamente una obra, pero algo más. Más que puedo desciribir. Era una "experiencia."
En sábado, fuimos a Gernika. Obviamente, esta ciudad es famosa por la pintura de Picasso. Por supuesto, estaba lluviendo por todo del día y esa situación no me permitió explorar mucho. Fuimos a La Casa de Juntas y vimos los Árboles de Gernika y aprendimos sobre la historia del gobierno Vasco y sus tradiciones. Era muy interesante e informativo, pero, tengo que admitir que estaba muy feliz para sentarme en al autocar acómodo y volver a Madrid. Era un fin de semana valorable, pero no creo que vaya a volver al País vasco de pronto.